“La jaula se ha vuelto pájaro” ALEJANDRA PIZARNIKAbrí las alas cuando más nos insistieron en cerrarlas y no seguir volando por todos esos lugares que nos marcamos antes de aterrizar en este bello planeta. Nos encerraron en jaulas, privándonos de la libertad de caminar la tierra, navegar el mar, encender juntos nuestras hogueras para prender la madera y que el humo viaje en el viento donde nuestras palabras llegan a los confines del corazón.

Somos seres espirituales viviendo la experiencia humana con la que ascender en consciencia junto a la eterna naturaleza del universo. Yo que soy, me adentré en el silencio más absoluto, me volví mudo, ciego, me encontré con el interior de mi alma y volé lejos, al espacio sideral para comprender que el tiempo es una linea en la cual podemos viajar sin movernos.

Renací, llegué de nuevo por la puerta cuántica de mi pecho y justo ahí empecé a despedirme de la prisión de mi mente. Un día como otro cualquiera seguí caminando la playa sin mirar atrás, sin miedo, confiado y viviendo en el instante del ahora, presencia, plenitud, abundancia, infinidad, eternidad.

. .