El encuentro entre un adolescente y un predicador callejero profundizó en el peso del pecado, con el adolescente cuestionando su gravedad, sugiriendo variaciones como diez u ochenta libras y expresando escepticismo sobre su carga. En respuesta, el predicador planteó un escenario hipotético y preguntó si se sentiría un peso de cuatrocientas libras colocado sobre el pecho de un hombre muerto.

¿Le gustaría saber más sobre el intercambio entre el adolescente y el predicador callejero?Si bien los Santos Evangelios no documentan las palabras habladas de San José, su testimonio de vida ha inspirado extensos escritos, oraciones y sermones a lo largo de los siglos. Estos lo han posicionado como una figura venerada, sirviendo como modelo y potente intercesor en asuntos espirituales.

Elegido por Dios por sus virtudes, San José sirvió como guardián humano de Jesús y fiel protector de la Virgen María, siendo parte de la Casa de David, linaje del que se profetizó que vendría el Mesías. La Iglesia venera a San José como su patrón, honrando su papel como esposo de la Virgen María y padre adoptivo de Jesucristo, cabeza de la Iglesia.

Que San José nos proteja a nosotros y a nuestras familias, inspire santidad y fomente las vocaciones dentro de la Iglesia. Particularmente en el clima actual, donde la familia cristiana enfrenta desafíos, que la fiesta de San José, el 1 de mayo, sirva como ocasión para celebrar la paternidad.

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