Mesopotamia, considerada la cuna de la civilización, ha sido el hogar de sumerios, babilonios, asirios y acadios. En esta tierra entre ríos tuvieron lugar los mayores avances de la Humanidad que cambiarían drásticamente el transcurso de la Historia: la invención de la rueda y de la escritura.

En un terreno inhóspito, rodeado por desiertos y barro, diversos pueblos aprovecharon la fertilidad del Tigris y el Éufrates para formar las primeras estructuras sociales de mayor complejidad. Así, aparecieron las primeras ciudades-estado como Ur o Uruk que durante el III milenio a.

C. se batieron por obtener la hegemonía del creciente fértil.

Mientras que en Mesopotamia se construían los primeros zigurats, grandes templos escalonados, Egipto todavía no había sido unificado y quedaban varios siglos para que Stonehenge fuese construido. Mi principal objetivo con esta serie de artículos es lograr que este período obtenga el reconocimiento que merece, pues en mi opinión, ha sido eclipsado por el Imperio Egipto, sus pirámides y sus faraones.

Por esta razón gran parte de los principales reinos e imperios de la Edad Antigua han caído en el olvido de buena parte de la población como el Imperio Neoasirio, el Imperio Hitita o el Reino de Mitanni. Por lo tanto, la intención de esta serie de artículos es explicar la organización social, el arte y las creencias de las distintas culturas que habitaron Mesopotamia durante toda la Edad Antigua hasta llegar a las conquistas de Ciro el Grande.

Pasando por la creación del primer imperio del mundo, el imperio acadio, hasta los distintos períodos de dominio asirio, así como la enigmática civilización sumeria. Desde los zigurats y los templos asirios hasta los famosos jardines colgantes de Babilonia o la Puerta de Ishtar del Imperio Babilónico, en estos artículos vamos a adentrarnos en casi tres milenios de Historia.

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