Un jefe de la mafia mágica me ha ofrecido un trabajo que no puedo rechazar. Me ha encargado que encuentre a su sobrino desaparecido, secuestrado por un hechicero.

Estos usuarios de la magia lanzan maldiciones y pelean sucio, y yo evito luchar con ellos a toda costa. Además, tengo mis propios problemas, como averiguar por qué puedo hablar con los muertos.

Como prefiero no contarme entre ellos, será mejor que termine este trabajo y pague mi deuda con el señor del crimen. Intento redimirme y tengo miedo de meter la pata.

Mis nuevos amigos ven algo en mí, el tipo de persona que quiero ser pero que nunca me dejaron llegar a ser. A pesar del peligro en el que me encuentro, prometo mantenerlos a salvo y asaltar las puertas del infierno por ellos si es necesario.

Sólo espero no caer en mis viejos hábitos por el camino. El peligro aparece en el horizonte.

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Tanto si se trata de una agencia secreta del gobierno que me persigue como de un aquelarre de magos malvados dispuestos a vengarse, tengo mucho trabajo por delante. Sin embargo, algo me dice que una fuerza aún más oscura está moviendo los hilos, y con mis amigos a mi lado, podríamos tener una oportunidad contra ella.

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