Kenneth Salazar recién ha terminado su desayuno y un fuerte sonido lo alerta. ¡Algo había chocado con la ventana de la cocina! Su corazón se aceleró.

Súbitamente, una andanada de pájaros negrísimos se abalanza contra las ventanas, las quiebran y logran entrar. Lo atacan salvajemente.

Se defiende a cómo puede; mata a varios, los demás huyen. Sin tiempo para buscar una respuesta, sale de su casa hacia la Plaza de la Cultura, en San José, la capital, donde lo espera un autobús que lo llevaría, junto con otras personas, a Puntarenas para luego tomar un barco para ir a la Isla del Coco.

¡Sus vacaciones soñadas! En el viaje suceden cosas inexplicables y terroríficas. Son secuestrados por un algo que los ataca y mortifica.

Quedan varados en el Golfo de Nicoya. Equipaje se cataloga como realismo mágico, roza la línea de thriller sicológico.

Todo tiene que ver con ellos mismos. De a poco, ven cómo los sueños de sus vidas se van esfumando.

Sufren, se exasperan y pelean. La historia se enmarca en la provincia costera de Puntarenas de Costa Rica, se destaca su cultura (costumbres y creencias).

Paralelamente, una relato emerge: los guardacostas los buscan y con ellos más incertidumbre. El relato aborda varios temas que el lector va averiguando de a poco.

El nombre del libro, Equipaje, tiene que ver algo más que el paseo. .