Existe una conexión secreta, casi misteriosa, entre la psicología profunda y la física cuántica. Dos grandes pensadores del siglo XX, Carl Gustav Jung y David Bohm, nos invitaron a explorar las profundidades del inconsciente colectivo y el Universo implícito, abriendo visiones dirigidas a un territorio trascendental dentro de la psique humana y el orden sutil del propio cosmos.

Carl Jung, psiquiatra suizo y pionero de la psicología analítica, introdujo el concepto de inconsciente colectivo. Según Jung, el individuo comparte un tesoro de arquetipos, símbolos e imágenes profundas que resuenan en el alma colectiva de la humanidad.

Para Jung, no somos sólo individuos aislados, sino que estamos inmersos en un terreno psíquico común que nos conecta con el pasado ancestral y con la danza eterna del ser humano. En una perspectiva aparentemente lejana pero misteriosamente complementaria, encontramos a David Bohm, un físico teórico conocido por sus contribuciones a la física cuántica.

Bohm propuso la idea de un Universo implícito, en el que la realidad va más allá de las partículas y las leyes físicas clásicas. Para Bohm, el Universo está tejido de un orden sutil, en el que cada parte está en conexión directa con el todo, una totalidad que existe más allá de las limitaciones de las observaciones humanas.

Aunque estos dos genios pertenecen a esferas cognitivas diferentes, observamos que sus teorías interactúan y se fusionan, creando una sinfonía de ideas filosóficas y metafísicas. Ambos autores alimentaron una profunda curiosidad hacia el anhelo de lo trascendente, por la exploración de los misterios del alma humana y por la búsqueda de un significado universal.

Tanto el Inconsciente Colectivo de Jung como el Universo Implícito de Bohm enfatizan la interconexión entre todas las cosas, revelando la presencia de un nivel universal invisible y unificador que impregna cada aspecto de nuestra realidad. El libro tiene como objetivo investigar nuestra conexión con este orden universal invisible.

Jung y Bohm, con sus palabras iluminadas, nos ofrecen claves para acceder a mundos desconocidos, palabras que despiertan nuestros sentidos, ponen en movimiento nuestra mente y nos empujan a plantearnos preguntas incómodas pero vitales: ¿Cuál es la verdadera naturaleza del ser humano? ¿Cómo nos relacionamos con el universo que nos rodea? ¿Cómo podemos comprender mejor nuestro lugar en esta inmensidad cósmica?Mientras exploramos las obras de Jung y Bohm, nos toparemos con citas extraordinarias que despiertan y alimentan nuestra sed de conocimiento e intuición. Jung, en su ensayo "El arquetipo y el inconsciente colectivo", escribió: "Quien mira hacia afuera sueña, quien mira hacia adentro despierta".

Estas palabras nos inspiran a mirar más allá de las apariencias, a profundizar en lo más profundo del alma humana, en busca de esa sabiduría enterrada que nos conecta con algo más grande. Bohm, por otro lado, nos dio una visión única de la naturaleza de la realidad, argumentando: "El orden profundo de todo va más allá de las partículas, sus interacciones y sus leyes físicas".

Esta afirmación nos empuja a considerar el Universo como un organismo vivo, conectado de maneras impensables y aún inexploradas, un universo en el que la física cuántica nos asigna el papel decisivo de "observadores". Al mismo tiempo Jung nos invita a observarnos a nosotros mismos a través de la individuación, es decir, la búsqueda de nuestro propio “Yo”.

A través de la comparación de las teorías de Jung sobre el inconsciente colectivo y las de Bohm sobre el Universo implícito, podremos revelar los aspectos filosóficos y metafísicos comunes a estas dos perspectivas que, a primera vista, parecen pertenecer a campos diferentes. Este libro nos invitará a plantearnos preguntas fundamentales sobre la naturaleza de la existencia, el significado de nuestra vida y la conexión entre nuestro mundo interior y el universo exterior.

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