Esta es la continuación del libro "El pasado de la esposa", pero con cambios drásticos en los gustos sexuales del marido, que siempre se consideró estrictamente heterosexual. Hasta vivir en la casa de los suegros por algunas semanas durante la reforma del apartamento, Celso no era celoso y no le importaba lo que Eduarda hizo en la juventud o dejó que hicieran con su cuerpo.

Sin embargo, después de sentir celos al conocer a algunos de los chicos con los que ella folló, y de estar tan excitado como para querer conducir varios penes dentro de ella, él comenzó a tener deseos nunca experimentados - y que tal vez estuviesen apenas ocultos para aflorar en el futuro. Durante un trío con un vecino, el marido pasó a disfrutar de las mismas cosas que siempre agradaron a la esposa.

Desde el momento en que Ailton entró en el apartamento de enfrente, e incluso en los cuerpos de los vecinos, nada más sería como antes. Más que follar como loco, Celso tiene planes audaces para su futuro.

Observación: no se pierda las próximas historias involucrando a la pareja. En una, Celso tendrá sexo con varios hombres, incluso al mismo tiempo.

En otra, será la oportunidad de Eduarda de innovar, cuando probará el sabor de una vagina por primera vez en la vida – y difícilmente será la última. .