Descargo de responsabilidad: La información contenida en este libro, " El fuego cruzado" es una obra de ficción. Los nombres, personajes, empresas, lugares, eventos e incidentes son producto de la imaginación del autor o se utilizan de manera ficticia.

Cualquier parecido con personas reales, vivas o muertas, o con acontecimientos reales es pura coincidencia. Este trabajo no pretende reflejar ninguna entidad o evento real, y cualquier similitud no pretende ser tomada como un hecho.

Habíamos planeado meticulosamente cada detalle y la operación estaba preparada para su ejecución. Mamá y sus asociados estaban preparados para reunirse con Chocho y conmigo para la misión.

Durante las últimas semanas, nos habíamos estado organizando diligentemente: adquiriendo armas, realizando reconocimientos y atendiendo todas las tareas necesarias. Ahora estábamos preparados para hacer nuestro movimiento.

Hoy marcó la culminación de nuestros preparativos. Los agentes de mamá estaban apostados en el aeropuerto, brindándonos actualizaciones a Chocho y a mí, junto con los dos hombres adicionales que ella había enviado para ayudarnos.

Sin embargo, yo era cauteloso por naturaleza y albergaba sospechas sobre los hombres de mamá. Temiendo una posible traición, tomé medidas preventivas al reunirme con ellos, pirateando discretamente sus teléfonos para monitorear sus comunicaciones con Mumsy.

Al salir de casa, le informé a Sally que me embarcaba en un viaje de negocios a Douala. A pesar de su aprensión y de la inquietante pesadilla que había experimentado la noche anterior, me suplicó que lo reconsiderara.

Tomando mis manos, ofreció una oración sincera por mi seguridad. No obstante, mi compromiso con la operación permaneció inquebrantable y seguí adelante.

Al optar por no utilizar mi propio coche, concerté un encuentro con Chocho en Buea Road Park. Desde allí abordamos un vehículo de transporte público con destino a Douglas.

Al llegar, me encontré con mamá en un modesto bar de Pariso. Después de recibir las últimas instrucciones, partió hacia el aeropuerto mientras nosotros regresábamos a Bona ERI.

En Bona ERI aseguramos dos motocicletas. Chocho y yo montábamos en uno, mientras los hombres de mamá cogían el otro.

Partiendo hacia Tiko, llegamos a un lugar apartado junto a la carretera, donde esperamos más instrucciones de mamá. Después de una hora de anticipación, de repente sonó mi teléfono.

Al mirar la pantalla, vi que era mamá llamando. "Hola, mamá", respondí.

"Hola, Carl. ¿Están ustedes en posición?" ella preguntó.

"Sí, estamos listos. ¿Cuál es la situación?" Yo pregunté.

"Está en camino. Está solo con el conductor", informó.

"Entendido. ¿En qué tipo de auto están?" Pregunté.

"Un Jeep Lexus azul. Diles a todos que estén preparados.

No volveré a contactar contigo hasta después de la operación. Por favor, no falles.

Esto es crucial para todos nosotros. Toma el dinero y vete.

Si se resiste, elimínalo". .

Ambos", instruyó. "Me aseguraré de que no salgan con vida", afirmé.

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